Ubicadas en el complejo Las Toscas Office Canning, contábamos con una superficie muy reducida para resolver una gran cantidad de oficinas, el requerimiento era dividir el espacio en oficinas privadas debido a las dinámicas propias de la empresa. La propuesta hace foco sobre los límites de las oficinas, es decir sus cerramientos, el desafío de generar ámbitos privados sin dejar de entender el espacio como una totalidad, convertir ese límite (cerramiento) en espacio operativo de guardado y al mismo tiempo que genere grados de intimidad sin segmentar el espacio.
Decidimos pensar en mubles fabricados en taller que colgaran desde la losa existente colaborando con la idea de fluidez espacial, el sistema de dos placas de madera atravesadas por tensores que prensaban una lámina chapa galvanizada que se va adaptando, con el recurso del plegado, a las diferentes necesidades de uso.
